La viuda de Miguel Uribe Turbay expresó el dolor de que su hijo Alejandro deba crecer sin la presencia de su padre, en un país nuevamente sacudido por la violencia.

María Claudia Tarazona, viuda del senador y precandidato presidencial Miguel Uribe Turbay, asesinado el pasado junio, compartió este domingo un mensaje en el que manifestó su “profundo dolor” por la pérdida de su esposo y expresó su solidaridad con las familias de los 13 policías que murieron en un atentado el 21 de agosto en Antioquia.
“A una vez más, el mal arrebata lo más valioso de nuestra sociedad: sus familias. Trece policías, hombres que servían con honor y lealtad a la patria, fueron asesinados, al igual que mi amado Miguel, por el peor de los males”, escribió en una publicación de Instagram.
Tarazona también reflexionó sobre el impacto de la violencia en la niñez colombiana, recordando que, al igual que su hijo Alejandro, muchos niños crecerán sin sus padres. Expresó su acompañamiento “con el alma” a las esposas de los uniformados fallecidos, a quienes definió como mujeres que, con “el dolor más desgarrador y el alma rota”, deberán seguir adelante y criar a sus hijos en medio de la ausencia y el duelo.
“Estoy aquí para cada una de ellas, dispuesta a servirles y acompañarlas en este doloroso camino que ninguna familia debería recorrer jamás”, expresó.
Sus declaraciones se producen tras los dos atentados ocurridos hace dos semanas: el primero, contra una base aérea en Cali, atribuido al Estado Mayor Central de las disidencias de las FARC, que dejó seis civiles muertos; y el segundo, en Amalfi (Antioquia), donde una carga explosiva fue activada al aterrizar un helicóptero en una zona de erradicación de cultivos ilícitos, causando la muerte de 13 policías.
En total, los ataques dejaron 19 personas fallecidas y cerca de 80 heridas.
El asesinato de Miguel Uribe Turbay, quien falleció el 11 de agosto tras permanecer dos meses en estado crítico luego de sufrir un atentado, junto con la reciente ola de violencia, ha despertado en Colombia el temor de un posible retorno a la violencia política que marcó la campaña presidencial de 1990, cuando tres candidatos fueron asesinados.
Ante este panorama, María Claudia Tarazona hizo un llamado a la unidad nacional e invitó a los ciudadanos a alzar su voz frente a quienes representan la violencia. “Ese mal que todos sabemos dónde habita y quién lo encarna no puede arrebatarnos la fe, el amor ni la esperanza”, afirmó.