La canciller Rosa Villavicencio afirmó que se han sostenido conversaciones con el líder del régimen chavista, y aseguró que “sería lo más sano”.

El gobierno de Gustavo Petro apoyaría un plan para que Nicolás Maduro, líder del régimen chavista, deje el poder en Venezuela, permitiendo una transición hacia un nuevo gobierno. La salida se plantearía mediante diálogo político, sin necesidad de una intervención de Estados Unidos.
La canciller colombiana, Rosa Villavicencio, afirmó en una entrevista con Bloomberg que ha estado manteniendo conversaciones con Maduro y sus funcionarios para buscar una vía pacífica.
La canciller explicó: “Considero que Maduro podría aceptar esta propuesta. Podría salir sin enfrentar la cárcel, permitiendo la llegada de alguien que conduzca la transición y garantice elecciones legítimas”.
La ministra de Relaciones Exteriores enfatizó que una intervención de Estados Unidos no sería adecuada, a pesar de que ciertos sectores han insistido en ella.
Villavicencio advirtió que “una intervención podría provocar una crisis humanitaria muy difícil de atender”, y añadió que, por esa razón, el plan de transición política debería contar con el respaldo de la oposición venezolana, incluida la ganadora del Nobel de Paz, María Corina Machado.
Recientemente, María Corina Machado compartió un video titulado “Manifiesto de Libertad”, en el que afirmó que el régimen chavista se aproxima a su fin y que se abre la puerta a una Venezuela “renovada”. En el mensaje, insistió en la necesidad de elecciones libres y sostuvo que Maduro debe “rendir cuentas”, lo que indica que la propuesta del gobierno colombiano podría no contar con su apoyo.
La líder de la oposición venezolana afirmó: “Venezuela solo se levantará plenamente cuando quienes cometieron crímenes de lesa humanidad sean juzgados por la ley y por la historia”. Machado viajará el próximo 10 de diciembre a Oslo, Noruega, para recibir su Premio Nobel.
Según una investigación de The New York Times, el gobierno de Trump, que ha ejercido presión sobre Venezuela mediante el despliegue de tropas en el Caribe, reanudó conversaciones extraoficiales con Maduro para discutir su posible salida del poder.
El líder del régimen estaría dispuesto a abandonar el poder, pero impondría un plazo de entre dos y tres años, un período que Estados Unidos consideraría demasiado prolongado.
Colombia, que ha adoptado una postura ambivalente, buscará actuar como mediador en la resolución del conflicto político y social en Venezuela. Al mismo tiempo, mantiene tensiones con Washington y reclama con firmeza por los ataques a embarcaciones en el Caribe, que ya han dejado más de 60 víctimas mortales.