Los equipos operativos, logísticos y técnicos permanecen en disponibilidad para reforzar la respuesta local en caso de que el comportamiento del volcán presente nuevas variaciones.
El municipio de Puracé, en el departamento del Cauca, ha entrado en una etapa crítica dentro de su plan de gestión del riesgo, tras el reciente aumento de la actividad volcánica en el macizo Puracé, actualmente en alerta Naranja.
Durante una sesión extraordinaria, el Comité de Manejo de Desastres aconsejó evacuar de inmediato la Zona 1 —catalogada como de amenaza alta— debido a la recurrencia de sismos, las fuertes emisiones de gases y la constante caída de ceniza registrada en diversos sectores del municipio.
En esa zona residen alrededor de 70 personas, quienes fueron notificadas directamente por las autoridades municipales para realizar una evacuación preventiva y de manera organizada.
La emisión de esta orden corresponde únicamente al municipio, de acuerdo con los lineamientos que respaldan su autonomía administrativa para atender este tipo de situaciones.
Gobierno central y organismos de respuesta activan protocolos
Mientras el municipio ejecuta su plan de acción, el Gobierno nacional y el Sistema Nacional de Gestión del Riesgo de Desastres han puesto en marcha un proceso de alistamiento y preposicionamiento de recursos para enfrentar cualquier escenario que pueda presentarse.
Los equipos operativos, logísticos y técnicos permanecen en disponibilidad para apoyar y reforzar la respuesta local en caso de que la actividad del volcán registre nuevas variaciones.
La Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo de Desastres desplegará una comisión técnica especializada con el fin de fortalecer el monitoreo en terreno, analizar las condiciones del entorno y evaluar las necesidades urgentes vinculadas con rutas de evacuación, zonas seguras, comunicación con las comunidades y acciones de protección.
Recomendaciones para la comunidad
- Evitar acercarse al cráter y a las áreas clasificadas con alta amenaza.
- Utilizar tapabocas y proteger ojos y piel en caso de caída de ceniza.
- Mantener cubiertas las fuentes y reservorios de agua.
- Informarse y seguir únicamente las comunicaciones oficiales.
- Acatar las instrucciones del SGC, la UNGRD y de las autoridades locales.
- Tener preparado el kit de emergencia.