Ya han pasado 24 horas desde que se reportó el derrumbe en una mina artesanal de oro ubicada en la vereda San Antonio, en el municipio de Santander de Quilichao.
Ya se cumplen 24 horas desde la emergencia ocurrida en una mina artesanal de oro situada en la zona rural del municipio de Santander de Quilichao, específicamente en la vereda San Antonio.
Según los reportes, siete mineros habrían quedado atrapados dentro de un socavón de unos 28 metros de profundidad, que colapsó debido a la ausencia de medidas de seguridad y a prácticas inadecuadas en la operación.
Aunque los organismos de socorro llegaron al sitio desde las primeras horas, la incertidumbre y la preocupación aumentan con el paso del tiempo, ya que aún no se ha podido confirmar si los trabajadores continúan con vida.
Mientras tanto, familiares y amigos mantienen viva la esperanza de que los mineros sean rescatados con vida.
“Tengo fe en que Dios los tiene en algún refugio, esperando a ser rescatados”, expresó Aura Lida Galarza, pariente de uno de los trabajadores atrapados.
Las labores de búsqueda y rescate no se detienen y continúan siendo lideradas por las autoridades locales y regionales. A este esfuerzo se ha unido la comunidad, que ha llegado al lugar con alimentos, utensilios y todo lo necesario para permanecer allí el tiempo que sea necesario, en espera de noticias sobre los mineros.
En medio de la tristeza que ha generado esta tragedia, se confirmó que entre los atrapados en la mina se encontraría un menor de 17 años, amigo de Dairo Velazco Galarza, de 19 años, quien hasta ahora es la primera víctima identificada. Ambos jóvenes eran oriundos de la vereda Bajo San Francisco.
Los equipos de socorro continúan trabajando en la zona con el apoyo de maquinaria amarilla, mientras los familiares se aferran a la esperanza de hallar con vida a los mineros desaparecidos.
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