Conmovedor testimonio de Juan Camilo Trejos, estudiante que sobrevivió al trágico accidente en el que fallecieron diez personas.

El 24 de mayo, un grave accidente de tránsito ocurrido en Calarcá, Quindío, dejó un saldo fatal de diez víctimas: siete estudiantes, dos profesores y un funcionario administrativo de la Universidad Alexander von Humboldt. El grupo retornaba de una salida académica en el sector del Alto de La Línea cuando el bus en el que viajaban sufrió una falla mecánica que provocó el siniestro.
Juan Camilo Trejos, estudiante de ingeniería civil y uno de los sobrevivientes del accidente, habló por primera vez en una entrevista con Noticias Caracol, donde compartió su impactante testimonio.
Trejos, estudiante de tercer semestre, contó que aquel día fueron citados a las 6:00 a.m. en la universidad. El primer bus asignado presentó fallas, por lo que fue reemplazado. No obstante, el nuevo vehículo también mostró inconvenientes desde el comienzo del viaje.
“El bus comenzó el recorrido con fallas en la caja de cambios. A lo largo del trayecto tuvo problemas constantes para realizar los cambios de marcha, pero aun así seguimos con la actividad”, explicó.
La salida técnica contemplaba un recorrido por el corredor vial que conduce al túnel de La Línea. Durante la jornada, uno de los estudiantes que lamentablemente perdió la vida en el accidente, Yeison, le preguntó a una ingeniera de Invías por qué no existían rampas de escape para vehículos que pierden el control en ese tramo. De acuerdo con el relato de Trejos, la profesional respondió que las características montañosas del terreno dificultaban considerablemente la construcción de ese tipo de infraestructura.
En el trayecto de regreso, ya en las cercanías de Calarcá, el bus sufrió una falla total en el sistema de frenos. “El profesor que venía en el asiento del copiloto se bajó, se dio vuelta hacia nosotros y gritó: ‘¡Muchachos, agárrense que nos quedamos sin frenos!’”, recordó el joven, quien en ese momento solo pudo aferrarse con fuerza a una silla.
Trejos revive con profunda tristeza la angustia vivida dentro del bus, especialmente el momento en que temieron caer al vacío desde el puente El Helicoide, un tramo tristemente célebre por ser escenario de múltiples accidentes.
Tras el choque, él y varios compañeros que resultaron ilesos comenzaron a auxiliar a los heridos. Fue entonces cuando notaron que Yeison no estaba entre ellos. Se dirigieron al barranco y lo encontraron gravemente herido.
“Me respondió, estaba consciente. Le pedí que no se moviera, que los paramédicos ya venían. No quise tocarlo para no empeorar su estado. Más tarde supe que murió en el hospital”, relató.
El estudiante también narró que, al ponerse de pie, tomó un extintor para evitar que el bus se incendiara. Junto con un compañero de quinto semestre, ayudó a sacar bolsos y pertenencias por las ventanas. Entre las imágenes más difíciles de borrar, recuerda ver al profesor Daniel gravemente herido y no lograr encontrar al profesor Jorge Iván, ambos fallecidos en el accidente.
Luego de participar en las labores de rescate, Trejos fue trasladado a un hospital debido a un golpe en la espalda. “Lo que queda son los recuerdos: las últimas palabras de Yeison, las sonrisas de los profesores. Espero que la universidad nos brinde apoyo, no solo en lo físico, sino también en lo emocional”, manifestó.
También contó que tuvo la oportunidad de hablar con el hermano de Yeison. Aunque sabía que no había palabras suficientes para aliviar el dolor, le expresó sus condolencias. Al enterarse de que Juan Camilo había sobrevivido con heridas leves, el familiar solo pudo responder: “Gracias a Dios”.