Para finales de 2025, se prevé la llegada de cuatro trenes más al patio taller de Bosa, los cuales se incorporarán al proceso de inspección y verificación.

El primer tren del metro de Bogotá ya llegó al patio taller de Bosa y, una vez ensamblado, está listo para comenzar un proceso crucial que definirá su funcionamiento en la ciudad.
A partir de octubre, el tren iniciará las pruebas estáticas y dinámicas, etapas fundamentales para asegurar que el sistema opere correctamente, cumpliendo con los estándares de seguridad y calidad antes de su puesta en marcha.
Desde su arribo, el equipo técnico del concesionario, junto con la interventoría, ha preparado todo lo necesario para dar inicio a estas pruebas. El tren ya cuenta con el enganche mecánico y eléctrico correspondiente, se instalaron los pasillos de intercirculación entre los coches y se realizó una limpieza general del vehículo. Cada aspecto está siendo revisado con detalle para garantizar que no haya fallas.
Metro de Bogotá comienza con las pruebas estáticas
El metro dará inicio a las pruebas estáticas, previstas para mediados de octubre. Durante esta etapa, los especialistas evaluarán detalladamente cada sistema y subsistema del tren, incluyendo frenos, tracción, mando y control, además de los sistemas de información para los pasajeros. Asimismo, se suministrará energía al tren para comprobar el funcionamiento de la iluminación, la ventilación y los equipos internos, asegurando que todo opere correctamente antes de avanzar a la siguiente fase.
Estas pruebas permitirán evaluar el estado general del tren y, si es necesario, realizar los ajustes pertinentes antes de que el vehículo comience a circular por la vía de ensayo. La Empresa Metro de Bogotá destacó que este proceso es fundamental para asegurar la seguridad en la futura operación del sistema.
Pruebas dinámicas y certificación de los trenes
Una vez superadas las pruebas estáticas, aproximadamente un mes después comenzarán las pruebas dinámicas. En esta etapa, el tren será trasladado a una vía de ensayo de 905 metros que cuenta con un tercer riel para alimentar el sistema.
Durante estas pruebas se evaluará el desempeño de los motores de tracción y la eficiencia del sistema de frenado, tanto en condiciones normales como en situaciones simuladas de fallo. Además, se testearán los sistemas de información para los pasajeros, recreando las condiciones que enfrentarán los usuarios cuando el metro entre en operación.
Este procedimiento se aplicará a cada uno de los 29 trenes que irán llegando de manera progresiva a Bogotá. Tras obtener la certificación correspondiente, comenzarán las pruebas en el viaducto, programadas para mayo del próximo año.
Adicionalmente, se espera que antes de que termine 2025 lleguen cuatro trenes más al patio taller de Bosa, los cuales se integrarán al proceso de verificación. Esto marcará el inicio de la fase final para que Bogotá pueda contar, por primera vez, con su sistema de metro en funcionamiento.