El presidente, acompañado de varios ministros, asistió al cabildo popular realizado en el centro de Barranquilla.

El presidente Gustavo Petro llegó a Barranquilla, donde fue recibido por cientos de personas congregadas en el Paseo Bolívar, en pleno centro de la capital del Atlántico. El evento fue convocado por el propio mandatario con motivo de un cabildo abierto, tras el reciente hundimiento de la consulta popular.
Acompañado por un fuerte esquema de seguridad y por varios miembros de su gabinete —entre ellos Armando Benedetti, Antonio Sanguino y Edwin Palma—, así como por la directora del Departamento Administrativo de la Presidencia, Angie Rodríguez, Petro se dirigió a los asistentes con un discurso que se extendió por más de una hora. En su intervención, defendió su gestión y afirmó que “no está promoviendo nada malo para Colombia”.
Asimismo, enfatizó que su impulso a las reformas sociales no obedece a intenciones de buscar una reelección presidencial.
“No estoy pidiendo que elijan a nadie en particular. No estoy promoviendo un voto por Petro. No me imagino buscando la reelección, ni quiero convertirme en adicto al poder, porque eso me podría llevar a convertirme en un asesino”, expresó.
"No me sueño reelegido y no quiero volverme drogadicto del poder", dijo el presidente Gustavo Petro en su intervención en Barranquilla. #VocesySonidos pic.twitter.com/utpKBRT168
— BluRadio Colombia (@BluRadioCo) May 21, 2025
Por esa razón, volvió a compararse con varios congresistas de la región Caribe que se opusieron a la consulta, asegurando que, a su juicio, “Cree que le dieron la espalda a sus lectores”.
Sin embargo, uno de los puntos más relevantes de su intervención fue el anuncio de un diálogo de paz con las bandas criminales que operan en Barranquilla.
“Quiero dirigirme aquí, en Barranquilla, a esas bandas y a esos jóvenes, porque voy a comenzar las conversaciones del Gobierno con ellos. Admito que no conozco mucho del tema aún”, expresó al iniciar su planteamiento.
Durante su intervención, el presidente Gustavo Petro manifestó su intención de abrir un proceso de diálogo con las bandas criminales de Barranquilla, con el objetivo de disminuir la violencia en la ciudad.
“Queremos sentarnos a conversar para que dejen de agredir a sus propios vecinos y permitan que hasta los mismos traquetos puedan vivir sin temor. Así como logramos pacificar Medellín, también vamos a hacerlo con Barranquilla”, afirmó.
En otro de los momentos más contundentes de su discurso, el jefe de Estado anunció su respaldo a una posible huelga indefinida, delegando la conducción de esta movilización a la Coordinadora Nacional Popular de Movimientos y Organizaciones.
“Esta consulta popular no se va a discutir en frío. Creíamos que Efraín Cepeda estaba de nuestro lado, pero nos traicionó. Ahora entendemos que el nuevo escenario será la lucha popular. Que sigan diciendo que Petro solo llena plazas, pero esto va más allá. Desde ahora, cedo mi papel de dirigente popular a la Coordinadora Nacional Popular para que lidere las acciones que el pueblo decida emprender”, señaló.
Petro también hizo un llamado a la protesta pacífica y al respeto por la ciudadanía: “No se debe atacar a la clase media ni dañar bienes. Ni un vidrio roto. Tampoco se debe agredir a los miembros de la Fuerza Pública. A ellos les doy la instrucción de no levantar las armas contra el pueblo, porque debemos abrazarlos. No se deben bloquear los servicios esenciales como el acceso a alimentos o atención médica. El pueblo decidirá los tiempos”.
Cerrando su discurso, el mandatario lanzó una advertencia directa a las élites políticas y económicas del país: “La oligarquía debe saber que ahora tiene al pueblo en contra, porque no quiso dialogar ni alcanzar un acuerdo con el presidente. Si hay que ir a una huelga indefinida, el presidente no reprimirá al pueblo: estará de su lado. Y si me destituyen por eso, que estalle la revolución. No vamos a arrodillarnos”.
Edwin Palma liderará impulso de la reforma agraria
Al cierre del cabildo popular realizado en el Paseo Bolívar de Barranquilla, el presidente Gustavo Petro anunció que el ministro de Minas y Energía, Edwin Palma, será el encargado de representar al Gobierno en la promoción de la reforma agraria, en articulación con organizaciones sociales y sindicales.
“El movimiento campesino debe asumir desde ya la tarea de hacer realidad la reforma agraria. ¡Es urgente!”, expresó el mandatario. “Por eso, Edwin Palma —exsindicalista de Copetrol, expresidente de la USO, exviceministro de Trabajo y actual ministro de Minas— será el delegado del Gobierno para coordinar con las organizaciones sociales y populares. Él nos representará en esa instancia, que estará mayoritariamente conformada por sectores sociales, y desde allí se definirán las acciones a seguir”, agregó.