El presidente también dirigió un mensaje a los congresistas encargados de discutir y definir el destino de la reforma a la salud propuesta por su gobierno.

Durante su alocución de este viernes, el presidente Gustavo Petro cuestionó el más reciente informe de la Contraloría General sobre la situación de la Nueva EPS y defendió la actuación de su Gobierno durante la intervención iniciada en abril de 2024.
De acuerdo con el informe del organismo de control, la Nueva EPS atraviesa serias dificultades financieras y administrativas, incluyendo facturas sin tramitar (se reportaron 22,7 millones, de las cuales 9 millones estarían duplicadas), y más de $15,2 billones en anticipos no registrados durante el primer semestre de 2025 —una cifra que en 2024 fue de $8,6 billones.
La Contraloría también advirtió sobre numerosas deficiencias en la documentación de los contratos, agravadas por la ausencia de herramientas tecnológicas adecuadas para el registro y procesamiento de la información.
Frente a este panorama, el presidente Petro reiteró que los problemas de la Nueva EPS no son recientes, sino que se remontan a su origen, señalando que ha estado marcada por casos de corrupción desde sus inicios.
“Desde sus primeros afiliados, ha arrastrado una historia de saqueo. Al principio, en una escala menor, pero fue creciendo hasta convertirse en la EPS más grande del país. Lo que revela el contralor es que, en los últimos años, ha operado un esquema que ha desviado recursos públicos destinados a la salud de los afiliados hacia contratistas —siempre los mismos—”, afirmó Petro, apuntando también hacia la responsabilidad de ciertos sectores políticos.
En su intervención, Petro cuestionó el papel que desempeñan actualmente las EPS en el sistema de salud y arremetió contra los integrantes de la junta directiva de la Nueva EPS. Según el mandatario, estas personas han manipulado las cifras de la entidad, especialmente en lo relacionado con el manejo y reporte de sus deudas.
El informe de la Contraloría cubre tanto los periodos previos como los que transcurren durante la intervención del Gobierno, ya que recopiló 4.524 archivos de la Nueva EPS correspondientes desde 2022 hasta el primer semestre de 2025. Estos documentos incluyen información técnico-asistencial, administrativa, jurídica y financiera.
Los anticipos pendientes por legalizar aumentaron de $3,4 billones en 2023 a $15,27 billones en junio de 2025, lo que representa un incremento del 155 %, afectando la liquidez de la institución y elevando el riesgo de pérdida patrimonial, especialmente debido a anticipos mayores a dos años por un valor de $143.000 millones.
Además, hay 22,7 millones de facturas por un total de $22,1 billones que aún no han sido revisadas; de estas, 9,1 millones están duplicadas, equivalentes a $8,9 billones, lo que genera inconsistencias contables y financieras.
Petro fue más allá de la situación de la Nueva EPS y defendió con firmeza su proyecto de reforma en salud, así como otros programas que ha impulsado para el sector, destacando un aumento en la inversión a nivel nacional.
Actualmente, la reforma de salud sigue pendiente de debate en la Comisión Séptima del Senado, un proceso que podría retomarse la próxima semana.
“Durante dos años han tenido el proyecto y ahora quieren hundirlo nuevamente. ¿O acaso prefieren mantener un ‘Frankenstein’ de empresarios corruptos que han formado un cartel de contratación, cuyos responsables ya están en la justicia y cuentan con el respaldo de políticos y senadores?” cuestionó el presidente, sin mencionar nombres.
En el cierre de su discurso, Petro dirigió un mensaje contundente a los congresistas encargados de discutir la reforma, en medio de las críticas que ha recibido por las intervenciones en las EPS.
“Señores de la Comisión Séptima, pueden decidir, pero mientras tanto, las EPS seguirán quebrándose. Yo no voy a salvarlas, porque mi prioridad es salvar la salud de la gente. Me enfocaré en que cada vez mueran menos niños, menos mujeres y menos adultos que sí podían recibir tratamiento,” concluyó.
Estas denuncias, especialmente contra la Nueva EPS, han sido reiteradas en distintos escenarios, tanto desde la Casa de Nariño como por entidades como el Ministerio de Salud y la Superintendencia, que han señalado y denunciado irregularidades en la entrega de información por parte de la entidad.