Bruce McMaster expresó que tiene más expectativas de alcanzar un acuerdo con el nuevo ministro de Trabajo.

En una entrevista con Recap Blu, el presidente de la Asociación Nacional de Empresarios de Colombia (Andi), Bruce McMaster, afirmó que durante el mandato de la exministra de Trabajo, Gloria Inés Ramírez, no se logró concretar una reforma laboral que abordara los problemas reales del país, a pesar de que existía una buena relación para entablar conversaciones.
“Tenía una situación que diría era paradójica, en el sentido de que, con ella, manteníamos una relación cordial en la conversación o en el debate, pero nunca, después del 14 de marzo, logramos sentarnos a tratar de concertar una reforma laboral. Ella se negó a eso. Nunca quiso hacerlo”, afirmó en los micrófonos de Recap Blu.
Añadió que la exministra Ramírez “confió” en la capacidad del Gobierno para moverse en el Congreso, pero sin considerar la opinión de los trabajadores ni de los empleadores. Por esta razón, expresó que sí tiene la esperanza de que con el actual ministro Antonio Sanguino sea posible llegar a un acuerdo entre las partes para esta reforma laboral.
“Yo realmente lo digo hoy en día, teniendo una relación más cercana con ella que con el ministro Sanguino, pero sí tengo la ilusión o la esperanza de que con el ministro Sanguino se pueda lograr una conversación más efectiva”, agregó.
Andi sobre la reforma laboral:
McMaster destacó que la reforma laboral presentada por el Gobierno no resolvía los problemas de empleo y, en cambio, incrementaba la informalidad.
“La reforma destruye empleo, no genera empleo nuevo, genera informalidad, no genera trabajo formal… Me parece increíble realmente que algunos de los líderes de las centrales de trabajadores estén defendiendo una reforma que se olvida de los trabajadores, que se olvida de los trabajadores sin contrato”, afirmó McMaster.
Además, se refirió al llamado del presidente Gustavo Petro a la movilización y la consulta popular, calificándolo como una presión indebida sobre el Congreso, luego de que la reforma se hundiera virtualmente en la Comisión Séptima del Senado.
“No puede ser que haya una presión de esa forma o que, por ejemplo, se haya llamado a la violencia como lo hizo el presidente de la República ayer contra los congresistas. Los congresistas deben y necesitan actuar con independencia“, dijo McMaster.
Ahora, se debe esperar qué ocurrirá con la consulta popular o si se registran cambios entre los congresistas de la Comisión Séptima que permitan la reactivación de la reforma laboral del Gobierno nacional.