Por el momento, se informó que las dos mujeres que estaban con el detenido quedaron en libertad, después de que la Fiscalía decidiera no iniciar acción penal en su contra.

El joven Jaime Esteban Moreno Jaramillo, estudiante de 20 años de la Universidad de los Andes, fue asesinado en la madrugada del 31 de octubre en Barrios Unidos, tras una celebración de Halloween que terminó en tragedia.
El presunto responsable, Juan Carlos Suárez Ortiz, ya fue vinculado formalmente al proceso judicial tras la legalización de su captura. Durante la audiencia realizada este sábado 1 de noviembre de 2025, María Teres Cortés, representante del Ministerio Público, señaló que se trató de “una toma de justicia por mano propia”.
La funcionaria añadió que, tras ser interrogados sobre su participación en la pelea, los involucrados reconocieron que el enfrentamiento ocurrió porque Suárez Ortiz habría intentado abusar sexualmente de su amiga, Johana Parra Torres, dentro de la discoteca.
Camilo Rincón, abogado de la familia de la víctima, informó a Noticias Caracol que el caso continúa con la audiencia de imputación de cargos y la solicitud de medida de aseguramiento intramural, programada para el próximo 5 de noviembre.
El abogado indicó que, aunque la captura inicial se realizó por lesiones personales, la Fiscalía ahora buscará imputar el delito de homicidio, dado que Moreno Jaramillo falleció como consecuencia de los golpes recibidos.
Sobre el origen del conflicto, Rincón aclaró que “hubo un reclamo airado de una de las mujeres involucradas, pero se trató de una discusión menor que no trascendió dentro del establecimiento. No hubo violencia recíproca en el lugar; fue, digámoslo así, un desacuerdo que terminó escalando fuera del sitio donde compartían”.
El abogado destacó que la víctima trató de evitar que la situación se intensificara, señalando que “Esteban optó por retirarse del lugar justamente para esquivar este tipo de conflictos”.
El abogado Rincón calificó la agresión como “miserable”, resaltando la violencia ejercida contra Moreno cuando ya se encontraba indefenso. Tras recibir un primer golpe, el joven cayó al suelo, momento en el que los ataques continuaron.
Según Rincón, “un golpe certero lo dejó inconsciente y, en el suelo, le propinaron múltiples golpes en el rostro, el cráneo y varias zonas del tórax”.
El abogado concluyó que “Jaime Esteban no era alguien que se moviera en círculos donde existiera un alto riesgo de incidentes violentos o lamentables”.
Por otro lado, se informó que las dos mujeres que estaban con el capturado quedaron en libertad, luego de que la Fiscalía decidiera no ejercer acción penal en su contra.