Tras un mes del trágico atentado en Amalfi, en el que murieron 13 uniformados, un guía canino sobreviviente protagonizó un emotivo reencuentro con su perro.
Un mes de silencio, angustia y profunda tristeza. Eso fue lo que vivió el patrullero Diego Herrera, guía antinarcóticos de la Policía, desde aquel 21 de agosto, cuando un helicóptero institucional fue atacado con explosivos en zona rural de Amalfi, Antioquia. Ese trágico día murieron 13 uniformados. Herrera logró sobrevivir, pero enfrentó una pérdida que lo marcó profundamente: la desaparición de Telmo, su perro antinarcóticos, perdido en medio del caos.
Veintiocho días después, la historia dio un giro esperanzador. Un campesino de la región encontró a Telmo y lo entregó a las autoridades. Finalmente, el reencuentro con su guía se dio en Bogotá. Aunque el pastor belga malinois, entrenado para detectar explosivos, llegó desorientado, bastó con captar el olor familiar para reconocer a Herrera y correr hacia él.
Con la voz entrecortada, el patrullero relató el emotivo momento: “Este sentimiento es difícil de describir. Me siento inmensamente feliz de tener a Telmo nuevamente a mi lado. Han sido días muy duros, tanto para él como para mí. Pero hoy, tenerlo aquí conmigo, lo cambia todo”.
Atentado en Amalfi, Antioquia
El reencuentro con Telmo también removió recuerdos dolorosos. El patrullero Diego Herrera rememoró los dramáticos momentos vividos el día del atentado en zona rural de Amalfi.
“Cada vez que subíamos al helicóptero, Telmo y yo teníamos un lugar fijo. Al aterrizar, comenzamos a inspeccionar el cultivo, pero fuimos sorprendidos por una explosión. Él se asustó mucho y lo sujeté para evitar que se escapara. Cuando intentábamos subir de nuevo a la aeronave, lo abracé. Justo al cerrar la puerta, escuché una fuerte detonación… y luego, todo se volvió oscuridad”, relató Herrera.
Al recuperar el conocimiento, se encontró dentro de un cráter, alejado del helicóptero y sin rastro de Telmo. Sus compañeros, creyendo que el perro había muerto, le informaron erróneamente que había sido uno de los caninos caídos en el ataque. Sin embargo, la realidad era otra: Telmo estaba vivo.
Semanas después, un campesino de la zona lo devolvió, afirmando que había sido presionado por presuntas disidencias de las Farc para entregar al animal. El inesperado regreso de Telmo trajo consuelo en medio del dolor y cerró un capítulo marcado por la tragedia.
El regreso de Telmo provocó una ola de reacciones en todo el país. Incluso el presidente se pronunció en redes sociales: “Volvió Telmo, el perro antiexplosivos que se perdió durante el ataque del frente 36 al grupo policial en Amalfi. Se reencontrará con su dueño”.
Para el patrullero Diego Herrera, el reencuentro con su compañero va más allá de lo que las palabras pueden expresar.
“En cuanto percibió mi olor, supe que me reconoció. Ahora está aquí, a mi lado. Ese abrazo con Telmo representa la esperanza que necesitábamos tras tanto dolor”, afirmó, visiblemente conmovido.