Ricardo Rafael González fue enviado a la cárcel mientras continúa el proceso en su contra por el homicidio del estudiante de la Universidad de los Andes, Jaime Esteban Moreno, ocurrido en la madrugada del 31 de octubre.

La juez sexta de control de garantías de Bogotá ordenó medida de aseguramiento en establecimiento carcelario contra Ricardo González, de 23 años, señalado como uno de los presuntos implicados en el homicidio de Jaime Esteban Moreno Jaramillo, estudiante de la Universidad de los Andes de 20 años, quien falleció tras recibir una violenta golpiza en la madrugada del 31 de octubre.
Durante la audiencia, la juez señaló: “Quien patea la cabeza de un ser humano no puede afirmar que no previó un desenlace mortal”. Añadió además que “este caso no corresponde a una simple riña ni a un acto aislado de intolerancia o justicia por mano propia; se trata de una tragedia […] una agresión letal desde el primer instante”.
La decisión se tomó luego de que la Fiscalía solicitara la imposición de la medida privativa de la libertad, argumentando que González representa un riesgo para la comunidad y que existe la posibilidad de que no comparezca al proceso si permanece en libertad.
La Fiscalía señaló ante el despacho que tanto González Castro como Juan Carlos Suárez Ortiz —el primer detenido e imputado en este proceso— habrían actuado con la intención de causar la muerte del estudiante. Según el ente acusador, “si solo hubieran buscado darle una lección mediante algunas lesiones, la primera agresión habría sido suficiente. No obstante, regresaron, tomaron impulso y continuaron golpeándolo. Aun cuando tuvieron la oportunidad de detenerse y reflexionar sobre lo ocurrido, eligiendo decir ‘hasta aquí’, decidieron volver a agredir”.
Según lo expuesto por la Fiscalía, los agresores abandonaron la escena después de observar que la víctima se estaba asfixiando con su propia sangre y que presentaba hemorragia por la boca, los ojos y la nariz.
Para la fiscal, este comportamiento demuestra claramente una intención dirigida a causar la muerte. “Este tipo de acciones, este desprecio absoluto por la autoridad y por la vida humana, permiten afirmar la gravedad del delito. Es una de las razones establecidas por el legislador para concluir que la libertad del señor Ricardo representa un riesgo para la comunidad”, afirmó.
Durante la audiencia, la fiscal también hizo referencia a antecedentes de comportamiento del procesado y puso en duda las circunstancias de su presencia en la fiesta universitaria donde ocurrieron los hechos. Indicó que González habría enfrentado dificultades laborales relacionadas con el consumo de alcohol y señaló que acudió al evento en la Universidad de los Andes invitado por Juan Carlos Suárez, quien presuntamente costeó su ingreso.
Entre los argumentos presentados por la defensa para evitar la imposición de la medida de aseguramiento, la abogada Marcela López afirmó que, con base en los testimonios y los videos analizados, Ricardo González no habría ejecutado por completo la conducta atribuida ni sería responsable directo del homicidio.
De igual manera, cuestionó las afirmaciones de la fiscal respecto a la presencia de González en una fiesta privada de la Universidad de los Andes, calificando esos señalamientos como clasistas durante su intervención.