Petro afirmó que el ELN ha aumentado su presencia en el Catatumbo con guerrilleros provenientes de Arauca y criticó que las autoridades no contaran con “ningún tipo de información” sobre esta situación.
El presidente Gustavo Petro afirmó este martes que la crisis en la región del Catatumbo, donde los enfrentamientos entre el ELN y las disidencias de las Farc han dejado más de 80 muertos, representa un claro ejemplo del “fracaso de la nación” y constituye “uno de los episodios más dramáticos” de la historia reciente del país.
“Lo que ocurre en el Catatumbo es una lección… también se aprende de los fracasos, y allí hay un fracaso de la nación”, comentó Petro durante la presentación de la Línea Anticorrupción 157, añadiendo que “este puede ser uno de los hechos más dolorosos” de la historia contemporánea.
La crisis humanitaria y de seguridad en el Catatumbo, en el departamento de Norte de Santander, era una situación ya anticipada por varias autoridades, incluyendo la Defensoría del Pueblo, que el 15 de noviembre alertó, a través de su sistema de alertas tempranas, sobre “el riesgo” que enfrentaba la población civil debido a la presencia y las amenazas de los grupos armados ilegales.
Desde el jueves pasado, cuando el ELN inició los ataques contra el Frente 33 de las disidencias de las Farc, alrededor de 80 personas han sido asesinadas en el Catatumbo, incluyendo al menos seis firmantes del acuerdo de paz de 2016.
Además, según informó este martes la Presidencia, 22.570 personas se han visto desplazadas y se encuentran albergadas en diversas localidades, como Ocaña, Hacarí, Cúcuta, Tibú, Teorama, San Calixto, Convención y Ábrego.
Petro afirmó que el ELN incrementó su presencia en el Catatumbo con guerrilleros que llegaron desde el departamento de Arauca y cuestionó la falta de “algún tipo de información” por parte de las autoridades militares y policiales, destacando que se trató de un movimiento significativo.
“¿Por qué el ELN, que hace pocos meses era tan débil militarmente, ahora es fuerte? Esa es una pregunta que debemos investigar a fondo”, se preguntó Petro, quien acusó a la guerrilla de haber cambiado la “revolución por codicia”.
En relación con las cifras de víctimas mortales y desplazados, el presidente indicó que hay “más rumores que datos”, y señaló que el Gobierno aún no tiene “los datos exactos sobre cuántas personas han muerto”, ya que “32 es lo que se registra en las morgues”.
“Todos sabemos que aún no se ha llegado a muchos lugares”, agregó Petro.
Mientras tanto, el Ejército se ha enfocado en distribuir ayuda humanitaria y en el rescate de algunos líderes sociales perseguidos por el ELN. Por su parte, el presidente suspendió los diálogos de paz con esta guerrilla y anunció ayer la declaración del estado de conmoción interior y la emergencia económica, medidas que han sido objeto de cuestionamientos respecto a su alcance y efectividad.