“La convivencia pacífica solo se alcanza a través del diálogo”: mensaje de la Iglesia Católica en el Día de las Víctimas

Los obispos del país también resaltaron la labor de aquellos que, en las regiones, impulsan iniciativas para la construcción de la paz, a pesar de enfrentar nuevas adversidades.

Este miércoles, la Iglesia Católica se unió a la conmemoración del Día Nacional de las Víctimas del conflicto en Colombia, con un campanazo por la paz y un mensaje de esperanza para seguir adelante con los proyectos de reconciliación y reparación de quienes han sido afectados por la violencia.

La memoria de las víctimas mortales, que revive en este día, nos motiva a seguir trabajando con renovado esfuerzo por el perdón, la reconciliación y la paz”, señaló la Conferencia Episcopal de Colombia en un comunicado.

Además, los obispos del país resaltaron el trabajo de quienes, en las regiones, lideran iniciativas para construir paz, incluso frente a nuevas adversidades como el recrudecimiento de la violencia.

Su incansable trabajo brinda esperanza a las comunidades más necesitadas, ya que, a través de su servicio, cada herida recibe la ternura de Dios y es sanada por la fuerza de la solidaridad”, añadieron.

En el contexto del Jubileo Ordinario 2025, que invita a fortalecer la esperanza y la paz en el mundo, la Iglesia Católica hizo un llamado a no ignorar el clamor de las comunidades que exigen el fin del conflicto, y a respaldar los esfuerzos por una paz negociada en diversas partes del país.

“…Estamos convencidos de que la esperanza no defrauda, y que solo a través de la escucha, el diálogo, la justicia social y el compromiso con la defensa de los derechos humanos se puede alcanzar la convivencia pacífica, para que nunca más la violencia silencie la vida humana”, insistieron los obispos.

El mensaje de la Conferencia Episcopal concluyó con un llamado a seguir orando para que la convicción de poner fin al conflicto guíe cada política de paz y cada paso hacia un país reconciliado, “donde las víctimas del conflicto armado sean protagonistas de una nueva historia de dignidad, inclusión social y verdadera fraternidad”.

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