Los comparecientes aseguraron que había presión por las bajas y que buscaban beneficios, como permisos y otros incentivos, al obtener estos resultados. Estos fueron los testimonios.

En el Museo Casa de la Memoria en Medellín se llevó a cabo la segunda jornada de audiencias para el aporte de verdad plena y el reconocimiento de responsabilidad por parte de exmiembros de la Fuerza Pública que no fueron considerados como máximos responsables en casos de ejecuciones extrajudiciales ocurridas a principios de los años 2000 en el Oriente de Antioquia.
El tercer caso abordado por la JEP fue el de Erasmo de Jesús Avendaño Castaño, un campesino de la vereda Despensas en el municipio de El Peñol, quien fue asesinado por miembros del Batallón de Artillería No. 4 ‘Jorge Eduardo Sánchez’. Aunque simularon un combate, le implantaron material de guerra en su cuerpo y luego lo presentaron como una baja en medio de supuestos enfrentamientos.
Javier Antonio Carvajal, comandante de la Batería ‘Bombarda 1’, relató en la audiencia que existía una fuerte presión por parte de los superiores para reportar bajas. Además, explicó que uno de los motivos detrás de estos actos era la posibilidad de obtener beneficios como días de descanso después de largas semanas sin ver a sus seres queridos.
“Había muchas baterías que tenían muchos combates y producían muchos resultados. Y entonces me imagino que los soldados, al ver que otros salían de permiso cada poco tiempo, tras producir una baja, mientras nosotros llevábamos seis, cuatro, cinco meses sin poder visitar a nuestras familias, también sentían esa presión”, indicó.
En ese entonces, Jaime Arteaga, quien era soldado profesional del batallón, narró que fue él quien disparo contra Avendaño sin razón alguna cerca de su vivienda.
“Cuando yo vi el señor, nosotros arrancamos para allá. El señor salio corriendo y yo le dispare en las partes bajas, ahí no hubo combate, no hubo encuentro de hostigamiento”, afirmó.
En el marco de estos mismos hechos, el excomandante Carvajal reconoció que, tras enterarse de la muerte del civil, reportada como un incidente ocurrido en medio de un supuesto enfrentamiento, no realizó más investigaciones y confío en el informe de sus subordinados, a pesar de que, más tarde, los análisis de los relatos empezaron a generarle dudas.
“Los soldados me dieron esa versión y pensé: ‘Bueno, ya es mi primera baja, ya tengo resultados que mostrarle al batallón’, así que me quedé con eso, me quedé con la versión de los soldados y no indagué más”, afirmó Carvajal.
En la audiencia de aporte a la verdad también participaron los exmilitares Álvaro Fernando Bocanegra, Gustavo Londoño López, Carlos Augusto Polo Ortega, Horacio Fernando Misas Echavarría, Walter de Jesús Gómez Álvarez y Jaime Humberto Arteaga Villegas.
Se espera que este viernes 4 de abril se realice la tercera y última jornada organizada por la JEP en la ciudad de Medellín, la cual abordará cinco hechos que involucran a 25 comparecientes.